Valentine es una mexicana no binaria de primera generación que nació y creció en Los Ángeles.
Caminando por la pasarela en el regreso triunfal de Marc Jacobs para FW21, Valentine Álvarez explotó en la escena de la moda. Su mandíbula puntiaguda, sus cejas blanqueadas y su forma de andar inconfundible dejaron boquiabiertos tanto al casting como a los espectadores, y desde entonces no hemos podido quitárnoslos de la cabeza. Los últimos meses los han visto brillar en la portada de la revista OFFICE y desfilar para diversos espectáculos como Gabriela Hearst y Savage X Fenty. A continuación, comparten pensamientos sobre su viaje hasta el momento, qué los mantiene conectados a tierra y cómo han descubierto el camino hacia el verdadero amor propio significativo.
«Durante mucho tiempo, cuando me miraba a mí mismo, no veía la belleza. Realmente no me gustaba mi reflejo, pero tampoco me gustaba mí mismo. Siempre encontré diferentes cosas que odiar de mí mismo. Creo que se volvió mucho más fácil ver la belleza exterior cuando comencé a ver la belleza que tenía dentro de mí. Reconocer las cosas que aprecio y admiro dentro de mí me dio la confianza para ver la belleza que tenía de múltiples maneras. Siempre tuve momentos en los que usaba ropa extravagante o maquillaje escandaloso, lo que siempre me hacía sentir hermosa por las razones equivocadas. Estaba cubierto detrás de la imagen que quería proyectar. Creo que es asombroso cuando puede verse a sí mismo en su mejor y peor momento pero aún así ver la belleza.»
